BRIDE
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* Thanks to Saf1 for the pic
Thursday, February 22, 2007
Wednesday, February 14, 2007
Esta vez con el celular perdí más que el directorio telefónico y los SMSs (ya lamentable) también se fue la bolsita llena de memorias y el respeto que tenía por aquel primer amor.
Me siento en medio de un delirio nihilista, las cosas desaparecen de los modos más extraños y me da tanta tristeza… …como el niño que no volvió a preguntar por la conejita y me pongo a llorar con el cuadro tan triste. ¡Pobre bebe conejita! triste su vida y triste su suerte; o la amiga fiel que sorprendida o adolorida ve marchar a su compañera al lejano oriente en la forma más salvaje de suicidio.
Me siento en medio de un delirio nihilista, las cosas desaparecen de los modos más extraños y me da tanta tristeza… …como el niño que no volvió a preguntar por la conejita y me pongo a llorar con el cuadro tan triste. ¡Pobre bebe conejita! triste su vida y triste su suerte; o la amiga fiel que sorprendida o adolorida ve marchar a su compañera al lejano oriente en la forma más salvaje de suicidio.
Sunday, February 11, 2007
II
Aquí estoy, acopiando estrellas y tiritas de sol
Amontonando temblores, calor, abrazos
Venciendo mis miedos, procurando cuidados
Voy pintando recuerdos con acuarela
Con tus gestos, con mis pausas: rojo, lila, café
Delineando llamitas, islas que flotan en lagos
No estoy en otro lugar sino aquí, siguiendo tu rastro
Soplando zampoñas, acariciando altiplano
Murmurando suavito para que puedas dormir
Me quedo abrazada a tu cintura, delirando veranos
Viendo como febrero acumula rocío en tu ombligo
Pero nada convence, no hay consuelo
Aquí estoy, acopiando estrellas y tiritas de sol
Amontonando temblores, calor, abrazos
Venciendo mis miedos, procurando cuidados
Voy pintando recuerdos con acuarela
Con tus gestos, con mis pausas: rojo, lila, café
Delineando llamitas, islas que flotan en lagos
No estoy en otro lugar sino aquí, siguiendo tu rastro
Soplando zampoñas, acariciando altiplano
Murmurando suavito para que puedas dormir
Me quedo abrazada a tu cintura, delirando veranos
Viendo como febrero acumula rocío en tu ombligo
Pero nada convence, no hay consuelo
Friday, February 09, 2007
Tuesday, February 06, 2007
DE ZORRAS, UVAS Y TERAPEUTAS...
Aquellos que por uno u otro motivo coincidimos con Don Mario, conocemos también su famosa fábula de la zorra y las uvas... cuya moraleja se resume en la frase "Total que ni quería".
Nunca como hoy, una fábula se aplica a tantos contextos diversos. En esta noche de verano paceño, los amigos hemos lamentado no tener dotes de caricaturistas tras reflexionar respecto a nuestras propias modalidades, que divertido imaginar el tipo de zorra que nos toca... algunos negamos las uvas y otros las imaginamos, hay quienes las alcanzan e incluso el testimonio de las frutas. El abanico de posibilidades queda abierto.
No puedo evitar el sesgo profesional, hace tiempo que no veo a una familia en consulta, pero no por eso dejo de ejercer la terapia familiar. La primera vez que me "obligaron" a hacer de terapeuta pensé que me había equivocado de especialidad, no fue la primera ni la última vez que sentí ganas de salir corriendo, pero me quedé. Mi profesor, Emilio Ricci, nos envió a Mónica y a mi a hacernos cargo de la sesión, aún siento su contención y los nervios que me dificultaban la posibilidad de hablar realmente con aquella señora. Ya ha pasado mucho tiempo y en esta noche me invade la curiosidad de saber cómo está ella.
Pero lo que más me sorprende es sentir que el modelo que en un inicio parecía chino básico ahora es parte de mi. Se que me falta mucho por aprender y aún no me siento del todo terapeuta pero hace 3 años no hubiera imaginado que la fábula de la zorra y las uvas me llevaran a mirarme al espejo y aceptar que extraño la posibilidad de crecimiento a través del encuentro durante una sesión.
¡Habrá que ponerle remedio y ejercer!
Aquellos que por uno u otro motivo coincidimos con Don Mario, conocemos también su famosa fábula de la zorra y las uvas... cuya moraleja se resume en la frase "Total que ni quería".
Nunca como hoy, una fábula se aplica a tantos contextos diversos. En esta noche de verano paceño, los amigos hemos lamentado no tener dotes de caricaturistas tras reflexionar respecto a nuestras propias modalidades, que divertido imaginar el tipo de zorra que nos toca... algunos negamos las uvas y otros las imaginamos, hay quienes las alcanzan e incluso el testimonio de las frutas. El abanico de posibilidades queda abierto.
No puedo evitar el sesgo profesional, hace tiempo que no veo a una familia en consulta, pero no por eso dejo de ejercer la terapia familiar. La primera vez que me "obligaron" a hacer de terapeuta pensé que me había equivocado de especialidad, no fue la primera ni la última vez que sentí ganas de salir corriendo, pero me quedé. Mi profesor, Emilio Ricci, nos envió a Mónica y a mi a hacernos cargo de la sesión, aún siento su contención y los nervios que me dificultaban la posibilidad de hablar realmente con aquella señora. Ya ha pasado mucho tiempo y en esta noche me invade la curiosidad de saber cómo está ella.
Pero lo que más me sorprende es sentir que el modelo que en un inicio parecía chino básico ahora es parte de mi. Se que me falta mucho por aprender y aún no me siento del todo terapeuta pero hace 3 años no hubiera imaginado que la fábula de la zorra y las uvas me llevaran a mirarme al espejo y aceptar que extraño la posibilidad de crecimiento a través del encuentro durante una sesión.
¡Habrá que ponerle remedio y ejercer!
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